Diez años pateando la Sierra de Francia juntos…
Pero llevamos desde el otoño pasado sin hacer verdaderamente una excursión…
Desde que empezó a cojear…
Al principio, pensé que era artrosis o alguna torcedura, pero fue en aumento…
Los paseos se hacían cada vez más cortos…
Y la cojera cada vez más importante…
La sentencia cayó poco después de Reyes: Cáncer de hueso en la pata delantera derecha.
Ella que estaba siempre dispuesta para seguirme…
Ya no salía del termino…
Luego del pueblo…
Y al final del barrio…
Te echaremos de menos, Laika, tanto en mis paseos solitarios como en nuestras salidas en grupo.
Como buena pastora que eras, estabas pendientes de todos como si fuéramos tu rebaño.
Ibas de delante para atrás, corrías y venías. recogías cuatro veces el recorrido para tenernos agrupados.
Siempre te recordaré, cuando, sentados uno al lado del otro, mirábamos a lo lejos, hacia el horizonte, subido sobre un risco o una peña..
Sé que desde ese punto que mirábamos juntos, ahora me observaras en mis futuras caminatas
Adiós amiga mía
Te amo…