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Caminar en La Sierra de Francia, blog de senderismo

Villanueva del Conde – Sequeros

Ubicación: Villanueva del Conde
Recorrido: Circular, 3,4 km.
Duración. una hora.
Dificultad:Baja.
Señalizado en parte.

Para ver el mapa en Google Maps, haz clic en la imagen.

Todavía no existe un camino oficial que enlace los dos pueblos vecinos de Villanueva y Sequeros. Es una pena porque si fuera el caso, tendríamos todos los pueblos turísticos de la Sierra de Francia, desde La Alberca a Miranda del Castañar, pasando por San Martín del Castañar, unidos a través de una red de rutas señalizadas. Fue la razón por la que señalizamos hace unos años esta ruta circular, junto con otras cinco. Las señales de color verde y blanco indican que se trata de caminos de pequeño recorrido. Como expliqué en el articulo anterior, estos caminos ya no están mantenidos, por lo que pueden faltar algunas señales o flechas indicadoras. Pero con la ayuda que os proporciono aquí, no podéis perderos.

Este paseo ofrece la ventaja de salir de nuestras casas rurales Caño Chico y La Fuente y llegar a Sequeros para visitarlo sin coger el coche, descubrir un bonito mirador (ideal para ir a ver lluvias de estrellas) y en el último tramo, percatarnos de la sorprendente forma del pueblo de Villanueva, que le ha valido hace unos años, ser declarado de interés histórico-artístico.

Villanueva Del Conde: Una estructura defensiva civil única.

Si uno se pasea por el centro del pueblo, podrá comprobar que saliendo de la plaza de las Eras (plaza de la iglesia) y siguiendo el trazado de sus principales calles, volverá al punto de partida después de haber hecho un cuadrado casi perfecto. Si además es curioso, se habrá adentrado por debajo de uno de los 3 accesos que, pasando por debajo de las casas, desembocan en una zona verde sin a penas edificios salvo alguna cuadra, zona llamada las «huertitas».

Es desde un punto más alto, como al final de nuestra ruta, que podremos contemplar la curiosa forma del centro de Villanueva del conde: Sus casas unidas forman una muralla cuadrada. La zona verde interior, que entonces tenía varias regaderas de agua, era y sigue siendo zona de huertos. Cerrando los 3 accesos, permitía dejar el ganado protegido de ataques de lobos e incluso resistir un asedio de bandidos y tropas, esperando la ayuda del Conde cercano. Este tipo de arquitectura defensiva civil de época medieval es de gran interés, por eso no solo es un logro tener el «sello» de pueblo conjunto histórico para protegerlo, sino que ahora es importante recuperar y restaurar lo que se ha malogrado en este medio siglo y poner las huertitas en valor.

Sequeros: El pueblo de la Moza Santa.

Sequeros merece más que una visita. Pasear entre sus sinuosas y estrechas calles (la del Infernillo, dicen que es la más estrecha de toda la Sierra…) , visitar su bonito teatro (que suele tener una programación cultural muy interesante), y acercarse hasta la Iglesia del Robledo, donde se puede ver algunas reliquias de Simón Vela (el francés que encontró la estatua de la Virgen en la peña de Francia) y de la profetisa Juana, «la moza santa».

Es interesante, y diría incluso obligatorio para entender la comarca, conocer las dos leyendas que vinculan numerosos lugares de la Sierra de Francia: La leyenda de la profetisa Juana «la Moza Santa«, así como la de Simón Vela y La Virgen de la Peña de Francia.

La leyenda cuenta que Juana Hernández era una joven de Sequeros que murió en 1424 de la peste, pero antes de ser enterrada, profetizó varios hechos que se cumplieron poco después. Entre ellas, el descubrimiento de una imagen de la Virgen en la Peña de Francia, imagen descubierta por el francés Simón Vela que edificó allí las bases del monasterio.

Impresionante techo artesonado de la iglesia del Robledo, donde se encuentran los restos de la Moza santa.

La Moza santa profetizó también que caerían desde el horizonte tres señales luminosas en forma de cruz que marcarían el lugar donde se construiría posteriormente el convento de Santa María de Gracia, en San Martín del Castañar, y el Santuario de la Virgen de la Peña de Francia.Y por último, anunció que ningún rayo caería sobre la población de Sequeros, hecho que se ha cumplido hasta ahora. En Sequeros se recuerda la vida e historia de la Moza Santa durante la celebración de la fiesta de la Santa Cruz, el día 3 de mayo, con una procesión que parte desde la iglesia del Robledo.

Recorrido paso a paso.

Vamos a subir cuesta arriba hasta llegar a la entrada del pueblo, al cruce de «las 4 carreteras».

En el cruce, tiramos de frente por una pista. Tenemos allí el poste que nos indica nuestra ruta.

A unos 200 metros, tenemos que seguir subiendo siguiendo la pista. La de enfrente, más llana, es la de otra ruta, que lleva por encima de la piscina natural del pueblo.

Seguimos subiendo…

Llegamos a una zona de viñas que todavía están cultivadas.

Y llegamos a Sequeros, justo al lado de la plaza de toros.

Cruzamos la carretera, pasamos al lado de un parque…

Y ya que estamos cerca, nos vamos a desviar hacia el mirador de la cruz, que nos va a ofrecer unas vistas estupendas.

El mirador de la cruz, donde se rodó algunas escenas de la película «El nido», ofrece una vista panorámica de la sierra de Candelario hasta la Peña de Francia. Aunque un poco cerca de las luces del pueblo, es un sitio herboso muy bonito para pasar una velada veraniega a observar las estrellas o las lluvias de estrellas fugaces., Una cadena impide, en cambio, llegar con coche en el mismo lugar para descargar un telescopio pesado. Pero si el vuestro es pequeño, o si llevaís unos simples prismáticos, entonces el sitio os encantará.

Un mapa nos permite interpretar lo que vemos.

Y si no fuera por un feo repetidor de telefonía o televisión, tendríamos una bonita vista de la Peña de Francia (cortada a la derecha para evitar la parabólica)

Volvemos atrás y donde nos hemos desviado antes, cogemos a la izquierda por un camino que evita entrar en el pueblo. (pero podéis visitar el pueblo y después volver a este punto)

Pasamos al lado de una casa y nos metemos entre huertos por un caminito…

Cuando vemos un cruce, tenemos que coger a la derecha.

Para llegar enseguida a otra carretera que conduce a Sequeros, llamado el «camino viejo». Tenemos que alejarnos de sequeros girando a la izquierda.

Caminamos un poco…

…hasta encontrarnos con la carretera general. Cruzamos con cuidado si llevamos niños o mascotas.

En frente del cruce, podemos ver un poste que indica Villanueva, Cogemos este sendero.

Bajamos por el bosque, lindando con una finca de frutales. Pasamos al lado de esta caseta de captación de agua.

…hasta llegar otra vez a la carretera principal, justo por encima de Villanueva.

Caminamos un poco carretera abajo y bajamos por un sendero abrupto. La flecha de señalización nos lo indica claramente.

Después de haber bajado cerca de otra captación de agua, en medio de fincas que no hace tanto, estaban cultivadas, llegamos al pueblo donde podemos ver perfectamente la estructura cuadrada de la que hablamos antes.

Bajamos un camino cimentado hasta llegar a la carretera del pueblo, un poco por encima de nuestro punto de salida.

Enlaces de interés:

Información turística de Sequeros. Pagina del ayuntamiento.

Video que explica la forma singular del pueblo de Villanueva.

Un proyecto que no cuajó

Esta ruta, así como otras cinco, son parte de un proyecto que inicié en el año 2006. Entonces no existía el camino de los prodigios y Villanueva del Conde no contaba con rutas señalizadas. Siendo entonces el pueblo con más casas rurales de la Sierra de Francia, algunos pensamos que Villanueva se debía de ofrecer alguna oferta para que los turistas se quedasen en el pueblo, y gastasen algo de dinero en los bares y restaurante del pueblo. Por eso las rutas debían de ser circulares. Y limitándonos en señalizar pistas agrícolas y forestales, ya que tenía claro desde el principio que el trabajo de desbroce de bonitos caminos perdidos y su mantenimiento anual sería algo difícil de sostener con el voluntariado.

Porque mi apuesta fue esta: El voluntariado y altruismo de los vecinos del pueblo, contando ante todo con los propietarios de casas rurales y bares. La mitad de los establecimientos participaron aportando una pequeña cuota que debía servir a costear los gastos de material, pero como el dinero que no nos alcanzaba, pedimos al ayuntamiento de entonces que nos ayudara económicamente, cosa que hizo.

Compramos palos de castaño, pizarras, pintura, encargamos a un herrero unas flechas de hierro, y empezamos el primer año a marcar 4 rutas, y 2 el segundo año. La idea era de hacer unos cuantos más. Gracias sobre todo a mi amiga Rosa que quiero agradecer especialmente aquí, pudimos llevar a cabo la señalización del segundo año (las 2 rutas más largas) pero se hacía evidente que la falta clara de participación e interés de los vecinos del pueblo y de su ayuntamiento, recayendo todo el trabajo sobre unos poquitos (y especialmente dos o tres), iba a significar a la larga el parón de ese proyecto.

Los años siguientes, el nuevo y joven alcalde, que nunca quiso participar en el proyecto teniendo entonces un bar y un hotel-restaurante en el pueblo, empezó a despreocuparse aún más del asunto en cuanto se hizo el camino de los prodigios, la "joya de la corona" según él... (que ironía, es hoy diputado de turismo de la Diputación de Salamanca). Por falta de mantenimiento, sin hablar de los actos malintencionados (se quitaron 4 indicaciones apuntando a Villanueva, dejando las otras en los postes, como si algunos no quisieran que se llegase a este pueblo...), los caminos han dejado de ser un reclamo turístico para recaer poco a poco en el olvido...